¿Por qué una paciente que acaba de someterse a una histerectomía abdominal total experimenta intolerancia a la actividad?

Una paciente que acaba de someterse a una histerectomía abdominal total (TAH) puede experimentar intolerancia a la actividad por varias razones:

1. Trauma quirúrgico:someterse a una TAH implica un trauma quirúrgico significativo en la región abdominal. La disección y manipulación extensa de los tejidos durante el procedimiento puede provocar daño, inflamación y dolor en los tejidos. Como resultado, los pacientes pueden experimentar malestar, fatiga y debilidad general, lo que les dificulta realizar actividades físicas.

2. Dolor y malestar:el dolor y el malestar posoperatorios pueden afectar significativamente la capacidad del paciente para tolerar la actividad. El sitio quirúrgico puede estar sensible, hinchado y amoratado, causando molestias al movimiento. Además, los pacientes pueden experimentar dolor referido en el hombro debido a la presencia del gas utilizado durante la cirugía. La combinación de dolor y malestar puede dificultar que los pacientes realicen actividades físicas.

3. Cambios de líquidos y desequilibrios de electrolitos:durante la cirugía, los pacientes pueden experimentar cambios de líquidos y desequilibrios de electrolitos debido a la pérdida de sangre y la administración de líquidos intravenosos. Estos desequilibrios pueden provocar cambios en la presión arterial y la frecuencia cardíaca, lo que puede afectar los niveles generales de energía y la tolerancia a la actividad del paciente.

4. Inmovilización:después de la cirugía, generalmente se requiere que los pacientes restrinjan su movimiento para promover la curación y prevenir complicaciones. Este período de inmovilización puede provocar pérdida de condición física y debilidad muscular, lo que contribuye aún más a la intolerancia a la actividad.

5. Factores emocionales:Someterse a una cirugía mayor también puede tener efectos psicológicos y emocionales en los pacientes. La ansiedad, el estrés y la depresión pueden afectar significativamente los niveles de energía y la motivación de una persona para realizar actividades físicas.

6. Medicamentos:el tratamiento del dolor posoperatorio a menudo implica el uso de medicamentos opioides. Se sabe que los opioides causan sedación, mareos y náuseas, lo que puede contribuir aún más a la intolerancia a la actividad.

Por lo tanto, los pacientes que se han sometido a una TAH pueden experimentar intolerancia a la actividad debido a una combinación de trauma quirúrgico, dolor, cambios de líquidos, inmovilización, factores emocionales y medicamentos.