Los suplementos de vitamina D se presentan en dos formas: vitamina D2 y vitamina D3, que generalmente se enumeran en la lista de ingredientes de la etiqueta del suplemento. La forma natural que utiliza el cuerpo es la vitamina D3, que se produce en la piel a partir de una forma de colesterol combinada con la exposición al sol. Históricamente, el tipo de vitamina D utilizada para los suplementos ha sido la vitamina D2, que se prepara a partir de la levadura. Sin embargo, muchos fabricantes de suplementos también han comenzado a reformular sus productos con vitamina D3. Según los Institutos Nacionales de la Salud, la mayoría de los expertos recomiendan la vitamina D3 para satisfacer las necesidades de la vitamina D. Cuando compre suplementos de vitamina D, busque la vitamina D3 en la etiqueta.

Mejora del estado de la vitamina D

El bajo nivel de vitamina D se puede corregir con los suplementos de vitamina D. La vitamina D3 parece ser más efectiva para aumentar la vitamina D en el cuerpo que la vitamina D2. En un estudio de 1998 publicado en el "American Journal of Clinical Nutrition", el aumento en los niveles de vitamina D fue 1.7 veces mayor en los sujetos que tomaron 4.000 unidades internacionales de vitamina D3 que los que tomaron la misma dosis de vitamina D2. Otro estudio publicado en mayo de 2006 en la revista "European Journal of Clinical Nutrition" encontró que las mujeres posmenopáusicas con baja densidad ósea necesitan al menos seis veces más vitamina D2 que la vitamina D3 para mejorar el estado de la vitamina D en el cuerpo.

Función

La vitamina D debe convertirse a la forma funcional en el hígado. Este proceso de conversión es cinco veces más rápido con la vitamina D3 que con la vitamina D2, según un estudio publicado en el "Scandinavian Journal of Clinical and Laboratory Investigation" en 1986. En otras palabras, con la misma dosis de vitamina, puede esperar obtener cinco veces más vitamina funcional con vitamina D3.

Toxicidad

El exceso de vitamina D puede provocar un alto nivel de calcio en la sangre, lo que aumenta el riesgo de cálculos renales y el endurecimiento de los vasos sanguíneos, según los Institutos Nacionales de la Salud . Para prevenir la toxicidad, el cuerpo utiliza una proteína que se asocia con la vitamina D y evita su activación. La vitamina D2 no se une a esta proteína, así como a la vitamina D3 y, por lo tanto, tiene un mayor potencial de toxicidad, según un estudio que apareció en la edición de febrero de 2001 de la "American Journal of Clinical Nutrition".

Coherencia

El suplemento de vitamina D2 es menos confiable que la vitamina D3, especialmente para los ancianos. Un estudio en el "Journal of the College of American Nutrition" en 1999 informó una diferencia de edad en el efecto del suplemento de vitamina D2, produciendo un nivel de vitamina D dos veces mayor en los hombres más jóvenes que en los mayores. Sin embargo, cuando los investigadores usaron suplementos de vitamina D3, podían aumentar la vitamina D de forma confiable tanto en adultos jóvenes como en adultos mayores.