¿Qué haces si te pones Savlon en la oreja?
1. Daño al oído interno: Savlon contiene una alta concentración de cetrimida, que es un agente antiséptico. Cuando se introduce en el canal auditivo, la cetrimida puede irritar y dañar las delicadas estructuras del oído interno, incluido el tímpano y las pequeñas células ciliadas responsables de la audición. Este daño puede provocar potencialmente pérdida de audición, tinnitus (zumbido persistente en el oído) u otros problemas auditivos.
2. Riesgo de infección: El canal auditivo es una zona sensible que puede infectarse fácilmente si se introducen sustancias extrañas. Savlon, a pesar de ser un antiséptico, puede no ser eficaz contra todo tipo de bacterias y hongos que pueden provocar infecciones de oído. Colocar Savlon en el oído puede crear un ambiente favorable para la infección, especialmente si el tímpano ya está comprometido.
3. Bloqueo: Savlon, al ser un líquido, puede potencialmente obstruir el canal auditivo, provocando molestias, pérdida de audición o incluso un bloqueo total. Esta obstrucción puede interferir con el drenaje natural del cerumen y provocar problemas de audición.
4. Reacción alérgica: Algunas personas pueden ser alérgicas a los componentes presentes en Savlon, incluida la cetrimida o la clorhexidina. La inserción de Savlon en el oído puede desencadenar una reacción alérgica que provoca inflamación, picazón, dolor de oído o incluso hinchazón.
Si experimenta dolor de oído, molestias o cualquier otro problema relacionado con los oídos, es fundamental consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. Nunca intente automedicarse ni utilizar sustancias como Savlon en el oído sin consejo médico. Su médico puede brindarle opciones de tratamiento adecuadas y garantizar la seguridad de sus oídos.