No siempre. Si bien algunos granos pueden eventualmente llegar a un punto crítico y desaparecer por sí solos, otros pueden persistir o incluso empeorar sin el tratamiento adecuado. Algunos factores que pueden afectar si un grano desaparecerá por sí solo o no incluyen la gravedad del grano, su ubicación, el tipo de piel individual y la salud general. Para garantizar una curación adecuada y minimizar el riesgo de cicatrices o complicaciones, generalmente es recomendable consultar a un dermatólogo o profesional de la salud para obtener orientación sobre cómo controlar los granos, especialmente si son graves, persistentes o causan molestias significativas.