¿Alguien ha oído hablar de un cálculo renal que retrocede hacia el uréter en lugar de bajar a la vejiga?
Por lo general, los cálculos renales se forman en el riñón y viajan por el uréter hacia la vejiga a través de un proceso llamado peristaltismo, que implica contracciones musculares coordinadas. En la mayoría de los casos, si el cálculo es lo suficientemente pequeño, puede pasar a través del uréter y excretarse en la orina. Sin embargo, si el cálculo es más grande o encuentra una obstrucción, puede quedarse atascado en el uréter, provocando dolor e incomodidad.
Si un cálculo renal retrocede por el uréter, puede causar síntomas adicionales y potencialmente provocar complicaciones. Estos pueden incluir:
- Aumento del dolor y malestar en la espalda o costado.
- Dificultad o incapacidad para orinar (anuria).
- Infección del tracto urinario (ITU) por obstrucción.
- Daño renal si la obstrucción persiste durante un periodo prolongado.
Si un cálculo renal retrocede más arriba del uréter, es esencial buscar atención médica de inmediato. Las opciones de tratamiento pueden incluir terapia médica para disolver el cálculo, litotricia por ondas de choque para romperlo en fragmentos más pequeños o intervención quirúrgica en casos graves.
En general, aunque es inusual, aún es posible que un cálculo renal retroceda por el uréter y, si esto ocurre, se debe buscar atención médica inmediata para evitar posibles complicaciones.