Si lleva a su perro al veterinario por vómitos y diarrea, es probable que el veterinario le realice un examen físico, recolecte muestras de sangre y heces y posiblemente realice pruebas de imágenes como radiografías o una ecografía. El veterinario también puede recomendar hospitalización y líquidos intravenosos para prevenir la deshidratación. Las opciones de tratamiento pueden incluir medicamentos antidiarreicos, antibióticos y una dieta especial. En algunos casos, puede ser necesaria una cirugía si la causa de los vómitos y la diarrea es una obstrucción u otra afección grave.