¿Qué es la enfermedad de alziémer?
Factores de riesgo de la enfermedad de Alzheimer:
- Edad:el principal factor de riesgo de la EA es la edad avanzada, especialmente los mayores de 65 años.
- Antecedentes familiares:las personas con antecedentes familiares de EA tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
- Factores genéticos:determinadas variaciones genéticas, incluida la presencia del alelo APOE-e4, pueden aumentar la susceptibilidad a la EA.
- Enfermedades cardiovasculares:afecciones como la presión arterial alta, el colesterol alto, las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares aumentan el riesgo de padecer EA.
- Lesiones en la cabeza:los traumatismos craneoencefálicos graves pueden contribuir a un riesgo elevado de EA en el futuro.
- Diabetes:las personas con diabetes tipo 2 mal controlada tienen un mayor riesgo de desarrollar EA.
- Obesidad:el sobrepeso o la obesidad en la mediana edad pueden aumentar el riesgo de EA en la vejez.
- Tabaquismo:el tabaquismo prolongado se ha asociado con un riesgo elevado de EA.
Síntomas de la enfermedad de Alzheimer:
Los síntomas de la EA pueden variar según la etapa de la enfermedad:
1. Etapa temprana (leve):
- Pérdida leve de memoria, que a menudo implica dificultades de memoria a corto plazo.
- Dificultad para recordar nombres o eventos recientes.
- Preguntas repetitivas
- Cambios sutiles en la personalidad o el comportamiento.
2. Etapa media (moderada):
- El deterioro de la memoria se vuelve más severo.
- Dificultad para recordar historia personal o personas conocidas.
- Mayor confusión y desorientación.
- Dificultad con la lectura, la escritura y los cálculos.
- Mal juicio y toma de decisiones.
- Cambios de comportamiento, como agitación, ansiedad o depresión.
3. Etapa tardía (grave):
- Pérdida significativa de memoria y deterioro cognitivo.
- Incapacidad para reconocer personas o lugares familiares.
- Dificultad para comunicarse y comprender el lenguaje.
- Incapacidad para realizar tareas básicas de cuidado personal.
- Mayor dependencia de otros para el cuidado.
- Problemas de conducta, incluidas alucinaciones, delirios y agresividad.
Diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer:
El diagnóstico de la EA implica una evaluación integral realizada por un profesional de la salud, generalmente un neurólogo o un geriatra. El proceso de diagnóstico incluye:
- Historia médica y exploración física.
- Evaluación cognitiva:evaluación de la memoria, el lenguaje, la atención y las habilidades de resolución de problemas.
- Estudios de imágenes, como resonancias magnéticas o exploraciones PET, para examinar la estructura y función del cerebro.
Tratamiento de la enfermedad de Alzheimer:
Actualmente, no existe cura ni tratamiento modificador de la enfermedad disponible para la EA. El tratamiento tiene como objetivo controlar los síntomas, mejorar la función cognitiva y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. Se pueden recetar medicamentos como los inhibidores de la acetilcolinesterasa (AChEI) y la memantina para aliviar los síntomas y retardar el deterioro cognitivo. Las intervenciones no farmacológicas, incluida la terapia de estimulación cognitiva, el ejercicio físico y la participación social, también pueden ayudar a respaldar la función cognitiva y el bienestar general.