¿Qué pasa con el hígado?

Hígado:Anatomía y Funciones

El hígado es el segundo órgano más grande del cuerpo humano, después de la piel, y desempeña un papel vital en diversos procesos fisiológicos. Está ubicado en la parte superior derecha del abdomen, debajo del diafragma. El hígado es un órgano de color marrón rojizo oscuro y de textura esponjosa.

El hígado está compuesto por varios lóbulos y conductos que se encargan de diversas funciones. Algunas de las funciones principales del hígado incluyen:

1. Desintoxicación :El hígado actúa como centro de desintoxicación del organismo. Procesa diversas toxinas del torrente sanguíneo, como el alcohol, las drogas y sustancias nocivas absorbidas por el sistema digestivo. Estas toxinas se descomponen o se eliminan del cuerpo a través de la bilis o la orina.

2. Metabolismo :El hígado participa en el metabolismo de los carbohidratos, proteínas y lípidos. Convierte el glucógeno en glucosa, regulando los niveles de glucosa en sangre. Además, sintetiza proteínas y produce bilis, lo que ayuda en la digestión y absorción de grasas.

3. Almacenamiento :El hígado almacena glucógeno como reserva de energía. Cuando los niveles de glucosa en sangre bajan, el hígado descompone el glucógeno y libera glucosa en el torrente sanguíneo. También almacena vitaminas (A, D y B12) y minerales (hierro y cobre).

4. Producción de bilis :El hígado produce bilis, que es esencial para la digestión de las grasas dietéticas. La bilis ayuda a emulsionar y descomponer las grasas, lo que facilita su absorción en el intestino delgado.

5. Inmunidad :El hígado desempeña un papel en el sistema inmunológico. Produce proteínas que ayudan a detectar y neutralizar sustancias extrañas y microorganismos patógenos que ingresan al torrente sanguíneo.

6. Coagulación de la sangre :El hígado sintetiza factores de coagulación que son necesarios para la coagulación de la sangre. Estos factores ayudan a prevenir el sangrado excesivo en caso de lesión.

En general, el hígado es un órgano crucial involucrado en procesos fisiológicos esenciales, como la desintoxicación, el metabolismo, el almacenamiento, la producción de bilis, la inmunidad y la coagulación sanguínea. Su correcto funcionamiento garantiza la salud y el bienestar general.