¿Cómo matan las células asesinas?
Citotoxicidad directa:las células NK pueden matar directamente las células diana mediante un proceso conocido como "citotoxicidad directa". Esto implica la liberación de gránulos citotóxicos que contienen perforina y granzimas. La perforina crea poros en la membrana celular objetivo, lo que permite que las granzimas ingresen a la célula e induzcan la apoptosis o muerte celular programada.
Citotoxicidad mediada por células dependiente de anticuerpos (ADCC):las células NK también pueden mediar en la citotoxicidad mediada por células dependiente de anticuerpos. Este proceso implica el reconocimiento de células diana recubiertas con anticuerpos producidos por las células B. Los receptores Fc en la superficie de las células NK se unen a la porción Fc de los anticuerpos, lo que desencadena la liberación de gránulos citotóxicos y la posterior destrucción de la célula diana.
Señalización del receptor de muerte:las células NK expresan receptores de muerte, como Fas y TRAIL (ligando inductor de apoptosis relacionado con el factor de necrosis tumoral), en su superficie. Estos receptores pueden unirse a sus respectivos ligandos expresados en las células diana, lo que lleva a la activación de las cascadas de caspasas y la inducción de la apoptosis.
Liberación de citocinas:las células NK pueden liberar varias citocinas, incluido el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-alfa) y el interferón gamma (IFN-gamma), tras su activación. Estas citoquinas tienen efectos inmunomoduladores, promueven la inflamación, mejoran la respuesta inmune e inducen directamente la apoptosis en las células diana.
Interacción con otras células inmunes:las células NK pueden interactuar con otras células inmunes, como macrófagos y células dendríticas, a través de varios receptores y ligandos. Estas interacciones pueden modular la actividad de las células NK e influir en la respuesta inmune general.
En general, las células asesinas emplean múltiples mecanismos para matar las células diana, incluida la citotoxicidad directa, ADCC, señalización del receptor de muerte, liberación de citoquinas e interacción con otras células inmunes. Estos mecanismos contribuyen a la capacidad del sistema inmunológico innato para eliminar células infectadas o cancerosas y mantener la homeostasis inmune.