¿Qué tan grave es el diagnóstico de anemia aplásica?

La anemia aplásica es una afección grave y potencialmente mortal en la que la médula ósea no produce suficientes células sanguíneas. Esto puede provocar una escasez de glóbulos rojos (anemia), glóbulos blancos (leucopenia) y plaquetas (trombocitopenia).

La anemia puede causar fatiga, debilidad, dificultad para respirar y piel pálida. La leucopenia puede aumentar el riesgo de infecciones y la trombocitopenia puede provocar la aparición de hematomas y sangrado con facilidad. En casos graves, la anemia aplásica puede ser mortal.

El tratamiento de la anemia aplásica depende de la gravedad de la afección y de la causa subyacente. Las opciones de tratamiento pueden incluir transfusiones de sangre, antibióticos, fármacos inmunosupresores, trasplante de células madre y trasplante de médula ósea.

Con el tratamiento adecuado, algunas personas con anemia aplásica pueden entrar en remisión y vivir una vida normal. Sin embargo, la afección puede poner en peligro la vida, especialmente si no se diagnostica y trata a tiempo.