¿Qué hace el brazo?
El brazo permite movimientos de flexión (flexión) y extensión (enderezamiento) en la articulación del codo, que está formada por el húmero (hueso de la parte superior del brazo) y el cúbito y el radio (huesos del antebrazo). Esto nos permite acercar la mano al hombro o estirarla en varias posiciones.
2. Rotación:
El brazo permite la rotación, tanto hacia adentro como hacia afuera, en la articulación del hombro donde el húmero se encuentra con la escápula (omóplato). La rotación hacia adentro (girar la palma boca abajo) y la rotación hacia afuera (girar la palma boca arriba) son movimientos esenciales para muchas actividades diarias.
3. Abducción y aducción :
La abducción es el movimiento del brazo alejándose del cuerpo, mientras que la aducción es el movimiento hacia el cuerpo. Estos movimientos son posibles gracias a los músculos que rodean la articulación del hombro y son importantes para alcanzar, señalar y abrazar, entre otras tareas.
4. Subir y bajar :
El brazo se puede subir (movimiento hacia arriba) o bajar (movimiento hacia abajo) en la articulación del hombro. Estas acciones implican el trabajo coordinado de varios músculos, lo que nos permite levantar objetos por encima de nuestra cabeza o llegar hasta el suelo.
5. Control de motricidad fina :
El brazo desempeña un papel crucial en el control motor fino, que implica los movimientos precisos de la mano y los dedos. Esto es posible gracias a los numerosos músculos pequeños y las interacciones complejas entre los huesos, las articulaciones, los músculos y los nervios del brazo y la mano.
6. Soporte y estabilidad:
El brazo proporciona apoyo y estabilidad a las manos, permitiéndonos realizar tareas como sujetar objetos, empujar o tirar y mantener el equilibrio.
El rango de movimiento y la flexibilidad del brazo nos permiten realizar innumerables movimientos y actividades con precisión y fuerza, convirtiéndolo en una parte integral de nuestras interacciones diarias con el medio ambiente y nuestra capacidad para realizar diversas tareas.