¿Qué sucede con los huesos que no están sometidos a un estrés normal?

Los huesos que no están sometidos a un estrés normal sufren un proceso llamado atrofia, que conduce a una disminución de la densidad y la fuerza ósea.

- Esto ocurre porque el cuerpo reconoce que el hueso no se está utilizando tanto y reasigna el calcio y otros minerales que componen el hueso a otras áreas del cuerpo donde se pueden utilizar.

- Como resultado, el hueso se vuelve más delgado y débil, y es más susceptible a fracturarse.

- Por eso es importante realizar actividad física con regularidad para mantener la salud ósea.