¿Puedes enfermarte nadando en una piscina verde?

Nadar en una piscina verde presenta un mayor riesgo de enfermedad en comparación con nadar en una piscina tratada y mantenida adecuadamente. Las piscinas verdes indican la presencia de algas, bacterias y microorganismos potencialmente dañinos. A continuación se detallan algunos riesgos potenciales para la salud asociados con nadar en una piscina verde:

1. Infecciones de la piel:Las bacterias presentes en las piscinas verdes pueden causar infecciones de la piel como erupciones cutáneas, picazón e irritación. Estas infecciones pueden ocurrir debido al contacto directo con agua contaminada o mediante cortes y abrasiones en la piel.

2. Infecciones oculares:De manera similar, las bacterias y microorganismos en las piscinas verdes pueden provocar infecciones oculares como la conjuntivitis (conjuntivitis). Los síntomas pueden incluir enrojecimiento, picazón, hinchazón y secreción de los ojos.

3. Problemas gastrointestinales:Tragar agua contaminada de una piscina verde puede causar problemas gastrointestinales como náuseas, vómitos, diarrea y calambres abdominales. Este riesgo es particularmente preocupante para los niños pequeños que pueden ingerir accidentalmente agua de la piscina.

4. Problemas respiratorios:La inhalación de gotas en aerosol o vapores de una piscina verde puede irritar el tracto respiratorio y provocar tos, sibilancias, dificultad para respirar y ataques de asma en personas susceptibles.

5. Infecciones de oído:Los charcos verdes aumentan el riesgo de infecciones de oído, especialmente en personas con afecciones de oído preexistentes o tímpano perforado. Las bacterias del agua pueden entrar en el oído y provocar inflamación y dolor.

6. Enfermedad del legionario:Las piscinas verdes pueden ser un caldo de cultivo para la bacteria Legionella, que causa la enfermedad del legionario, una forma grave de neumonía. Esta infección es particularmente peligrosa para personas con sistemas inmunológicos debilitados.

Es importante tener en cuenta que la gravedad y probabilidad de estos riesgos para la salud dependen de varios factores, como el alcance de la contaminación, las condiciones de salud individuales y la duración de la exposición. Para prevenir enfermedades, se debe evitar nadar en piscinas verdes y los propietarios de piscinas deben tomar medidas adecuadas para mantener un saneamiento y un tratamiento del agua adecuados.