Los polímeros de glucosa, como el almidón y el glucógeno, se descomponen en moléculas de glucosa individuales durante la digestión. Luego, la glucosa se absorbe en el torrente sanguíneo, donde las células la utilizan como fuente de energía. Por lo tanto, sí, los polímeros de glucosa aumentan los niveles de azúcar en sangre de una persona.