No, todo lo que comemos no es completamente digerido ni utilizado por nuestro cuerpo. El sistema digestivo es responsable de descomponer los alimentos en componentes más pequeños que el cuerpo puede absorber y utilizar. Algunos alimentos son más digeribles que otros y la eficiencia de la digestión puede variar dependiendo de factores como la fisiología individual, la presencia de enzimas y la composición de los alimentos. Ciertos componentes de los alimentos, como la fibra dietética, pueden pasar por el tracto digestivo sin digerir y contribuir al volumen de las heces.