¿Alimentos que provocan reflujo en bebés amamantados?

Ciertos alimentos pueden contribuir al reflujo en los bebés amamantados. Aquí hay algunos alimentos desencadenantes comunes:

1. Productos lácteos:la leche de vaca, el queso, el yogur y otros productos lácteos pueden ser difíciles de digerir para algunos bebés y pueden provocar reflujo.

2. Cafeína:La cafeína, que se puede encontrar en el café, el té, el chocolate y algunos refrescos, puede relajar los músculos de la parte inferior del esófago, lo que aumenta la probabilidad de reflujo.

3. Menta:La menta, la hierbabuena y otros sabores de menta pueden relajar el músculo del esfínter entre el estómago y el esófago, provocando reflujo.

4. Frutas cítricas:Las naranjas, pomelos, limones y otras frutas cítricas pueden provocar acidez en el estómago, exacerbando el reflujo.

5. Tomates:Los tomates y los productos a base de tomate, como el ketchup y la salsa para pasta, suelen ser ácidos y pueden provocar reflujo en los bebés.

6. Cebollas y ajo:Estas verduras pueden provocar gases e hinchazón, lo que puede contribuir al reflujo.

7. Alimentos picantes:Los platos picantes pueden irritar el tracto digestivo y empeorar el reflujo.

8. Alimentos grasos:Los alimentos ricos en grasas, como las carnes fritas o grasas, los productos lácteos enteros y los refrigerios procesados, pueden hacer que el estómago tarde más en vaciarse, lo que aumenta la probabilidad de reflujo.

9. Jugos de frutas:Los jugos de frutas, especialmente los jugos ácidos como el jugo de naranja o el jugo de piña, pueden causar irritación en el esófago y provocar reflujo.

10. Chocolate:El chocolate contiene cafeína y también puede tener un alto contenido de grasas, los cuales pueden contribuir al reflujo.

Es importante tener en cuenta que los bebés pueden reaccionar de manera diferente a diferentes alimentos. Llevar un diario de alimentos puede ayudarle a identificar alimentos específicos que parecen provocar reflujo en su bebé. Si sospecha que un alimento en particular está causando problemas, puede eliminarlo de su dieta durante unos días y ver si el reflujo mejora.

Consulte a su pediatra si le preocupa el reflujo y los desencadenantes dietéticos de su bebé. Pueden brindarle orientación sobre cómo controlar el reflujo y garantizar que se satisfagan las necesidades nutricionales de su bebé.