Muchos animales, incluidas ballenas, elefantes, rinocerontes, hipopótamos, caimanes, cocodrilos y jirafas, pueden oír sonidos infrasónicos, y algunas especies son capaces de percibir frecuencias tan bajas como 20 Hz o menos. Además, algunos roedores y murciélagos también pueden detectar frecuencias infrasónicas, que utilizan para la ecolocalización y la comunicación.