¿Cuáles son los signos de la hematopoyesis?
- Aumento del recuento de glóbulos rojos: La hematopoyesis conduce a la producción de glóbulos rojos, lo que resulta en un aumento en su recuento.
- Aumento del recuento de glóbulos blancos: La hematopoyesis también aumenta la producción de glóbulos blancos, lo que provoca una elevación de su recuento.
- Aumento del recuento de plaquetas: Las plaquetas también se producen durante la hematopoyesis, por lo que su recuento también puede aumentar.
- Cambios en la médula ósea: La hematopoyesis puede provocar cambios en la médula ósea, como aumento de la celularidad y presencia de células sanguíneas inmaduras.
- Bazo e hígado agrandados: En algunos casos, la hematopoyesis puede provocar un agrandamiento del bazo y del hígado debido al aumento de la producción de células sanguíneas.
- Agrandamiento de los ganglios linfáticos: La actividad hematopoyética también puede provocar agrandamiento de los ganglios linfáticos.
- Aumento del flujo sanguíneo a la médula ósea: La hematopoyesis requiere un aumento del flujo sanguíneo a la médula ósea, que puede detectarse mediante pruebas de imagen.
- Niveles elevados de hemoglobina: La hemoglobina es una proteína que se encuentra en los glóbulos rojos y que transporta oxígeno. El aumento de la hematopoyesis puede provocar niveles más altos de hemoglobina.
- Aumento del recuento de reticulocitos: Los reticulocitos son glóbulos rojos inmaduros. El aumento de la hematopoyesis puede provocar un mayor recuento de reticulocitos.