¿Cómo se trata la hiponatremia grave?

El tratamiento de la hiponatremia grave depende de la causa subyacente y de la gravedad de los síntomas. En situaciones de emergencia que involucran síntomas neurológicos graves, puede ser necesaria la corrección de la hiponatremia sintomática aguda. Sin embargo, en la hiponatremia crónica, generalmente se prefiere la corrección gradual para evitar los riesgos asociados con la corrección rápida, como el síndrome de desmielinización osmótica (ODS). A continuación se ofrece una descripción general de los enfoques de tratamiento:

Hiponatremia sintomática grave:

1. Solución salina hipertónica (cloruro de sodio):

- Para pacientes con síntomas neurológicos graves, como convulsiones, obnubilación o coma resultantes de una hiponatremia profunda aguda, se necesita una corrección rápida para prevenir un daño neurológico mayor.

- El tratamiento preferido es la administración intravenosa (IV) de solución salina hipertónica (cloruro de sodio al 3%).

- La velocidad de infusión y el volumen de solución salina dependen de los niveles iniciales de sodio y de la presentación clínica del paciente.

- La estrecha monitorización del sodio sérico y del estado neurológico es crucial para evitar una corrección excesiva.

2. Manitol:

- En los casos en los que la solución salina hipertónica no esté disponible o esté contraindicada (p. ej., en pacientes con insuficiencia cardíaca), se puede utilizar manitol, un diurético osmótico.

- El manitol extrae agua del espacio extracelular, incluido el cerebro, reduciendo así el edema cerebral.

Hiponatremia crónica:

1. Restricción de líquidos:

- En casos de hiponatremia crónica, cuando el tiempo lo permita, se prefiere la corrección gradual para prevenir el SAO.

- La restricción de líquidos se utiliza comúnmente para promover la retención de sodio y aumentar los niveles séricos de sodio.

- La restricción suele ser de alrededor de 1000 ml por día o menos, lo que estimula los mecanismos naturales del cuerpo para corregir el desequilibrio.

- Se debe controlar estrechamente el equilibrio sérico de sodio y líquidos durante la restricción de líquidos.

2. Suplementación de sodio:

- Si los niveles séricos de sodio no mejoran únicamente con la restricción de líquidos, puede ser necesario administrar suplementos de sodio.

- Se pueden utilizar tabletas, cápsulas o soluciones de sodio orales o enterales, dependiendo del estado del paciente.

3. Diuréticos:

- En algunos casos de hiponatremia crónica con retención excesiva de agua, se pueden utilizar con precaución diuréticos como la furosemida para promover la excreción de agua y mejorar la eficacia de los suplementos de sodio.

4. Corticosteroides:

- En determinadas situaciones, como insuficiencia suprarrenal o afecciones que afectan el metabolismo de la vasopresina (p. ej., SIADH), pueden ser necesarios corticosteroides para abordar la causa subyacente de la hiponatremia crónica.

Es importante que el tratamiento de la hiponatremia grave se individualice según la presentación clínica del paciente y la causa subyacente. La monitorización estrecha del sodio sérico, el estado de los líquidos y los síntomas neurológicos es crucial para guiar las decisiones terapéuticas adecuadas y evitar posibles complicaciones.