¿Causas comunes de anemia hipocrómica microcítica?

Las causas más comunes de anemia hipocrómica microcítica son:

Deficiencia de hierro: El hierro es un mineral esencial necesario para la producción de hemoglobina, la proteína transportadora de oxígeno en los glóbulos rojos. La deficiencia de hierro es la causa más común de anemia hipocrómica microcítica y puede ser causada por una ingesta dietética inadecuada de hierro, una mala absorción de hierro o una pérdida de sangre.

Inflamación crónica: La inflamación crónica puede provocar una disminución de la absorción y utilización del hierro, lo que provoca deficiencia de hierro y anemia hipocrómica microcítica. Esto puede ocurrir en afecciones como la artritis reumatoide, la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa y el cáncer.

Talasemia: La talasemia es un grupo de trastornos sanguíneos hereditarios caracterizados por una producción reducida o ausente de una o más cadenas de globina, que son los componentes básicos de la hemoglobina. La talasemia puede causar anemia hipocrómica microcítica.

Anemia sideroblástica: La anemia sideroblástica es un grupo de trastornos raros caracterizados por una acumulación anormal de hierro en las mitocondrias de los precursores de los glóbulos rojos. Esto puede provocar una alteración de la síntesis de hemoglobina y anemia hipocrómica microcítica.

Envenenamiento por plomo: El plomo puede interferir con la síntesis del hemo, provocando anemia hipocrómica microcítica. Los niños son particularmente vulnerables al envenenamiento por plomo.

Enfermedad renal crónica: La enfermedad renal crónica puede provocar una disminución de la producción de eritropoyetina, una hormona que estimula la producción de glóbulos rojos. La disminución de los niveles de eritropoyetina puede provocar anemia, que puede ser microcítica e hipocrómica.