¿Cuál es la diferencia entre la deriva antigénica y el cambio antigénico?
Deriva del antígeno:
- Proceso gradual y continuo:la deriva del antígeno se produce de forma gradual y continua a lo largo del tiempo. Pequeñas mutaciones se acumulan en el genoma viral, concretamente en los genes que codifican las proteínas de superficie hemaglutinina (HA) y neuraminidasa (NA).
- Cambios menores:los cambios en las proteínas virales durante la deriva del antígeno son relativamente menores. Estas mutaciones pueden provocar ligeras alteraciones en la estructura de las proteínas HA y NA, pero la estructura general sigue siendo similar.
- Evasión inmune:Los cambios graduales en las proteínas virales pueden permitir que el virus evada la inmunidad preexistente. Esto significa que las personas que han estado expuestas previamente al virus de la influenza o que han sido vacunadas contra él pueden tener una protección menor contra las nuevas cepas.
Cambio antigénico:
- Cambio abrupto y significativo:el cambio antigénico ocurre cuando hay un cambio repentino y significativo en las proteínas virales, particularmente las proteínas HA o NA. Esto sucede cuando los segmentos del genoma viral que codifican estas proteínas se reemplazan por segmentos correspondientes de una cepa de virus de la influenza diferente.
- Cambios importantes:los cambios en las proteínas virales durante el cambio antigénico son significativos y conducen a una versión nueva o dramáticamente alterada de las proteínas HA y NA. Esto puede resultar en la aparición de una nueva cepa de influenza que sea muy diferente de las cepas anteriores.
- Potencial pandémico:el cambio antigénico puede provocar pandemias, ya que la nueva cepa puede infectar a una gran proporción de la población, incluso a aquellos que tienen inmunidad a cepas anteriores. El cambio en las proteínas virales puede resultar en una falta de protección cruzada, haciendo que las vacunas y la inmunidad existentes sean ineficaces contra la nueva cepa pandémica.
En resumen, la deriva del antígeno implica cambios graduales menores en las proteínas virales, lo que lleva a una disminución gradual de la eficacia de la inmunidad con el tiempo. El cambio antigénico, por otra parte, implica cambios repentinos y significativos en las proteínas virales, lo que potencialmente resulta en la aparición de nuevas cepas pandémicas capaces de infectar a una gran población.