¿Cómo estimulan las vacunas el sistema inmunológico?

La vacunación estimula el sistema inmunológico al introducir en el cuerpo una forma debilitada o inactivada de un patógeno (un agente causante de enfermedades, como un virus o una bacteria). Esto permite que el sistema inmunológico produzca anticuerpos contra el patógeno sin causar la enfermedad en sí.

Cuando se administra una vacuna, el sistema inmunológico del cuerpo responde de varias maneras:

1. Presentación del antígeno :La vacuna contiene antígenos, que son moléculas que desencadenan una respuesta inmunitaria. Las células presentadoras de antígenos (APC), como las células dendríticas, capturan y procesan los antígenos de la vacuna.

2. Activación de células T :Las células T son un tipo de glóbulo blanco que desempeñan un papel central en la respuesta inmune. Las APC presentan los antígenos procesados ​​a las células T, que se activan y comienzan a proliferar.

3. Activación de células B :Las células B son otro tipo de glóbulos blancos responsables de producir anticuerpos. Las células T activadas ayudan a estimular las células B para que produzcan anticuerpos específicos contra el antígeno presente en la vacuna.

4. Producción de anticuerpos :Las células B se diferencian en células plasmáticas, que son fábricas productoras de anticuerpos. Estas células plasmáticas liberan grandes cantidades de anticuerpos al torrente sanguíneo.

5. Formación de células de memoria :Algunas células B y T se transforman en células de memoria. Estas células "recuerdan" el patógeno específico, lo que permite que el sistema inmunológico genere una respuesta más rápida y sólida si la persona se expone al patógeno real en el futuro.

Como resultado de la vacunación, el sistema inmunológico se "prepara" para reconocer y combatir el patógeno específico si se encuentra en el futuro. Esta respuesta inmune es la que brinda protección contra la enfermedad causada por el patógeno.

Vale la pena señalar que diferentes tipos de vacunas pueden provocar respuestas inmunitarias ligeramente diferentes, pero el principio general de estimular el sistema inmunitario para que produzca anticuerpos y células de memoria sigue siendo el mismo.