¿Qué es una fiebre de origen desconocido?
Las causas de FUO se pueden clasificar ampliamente en:
- Enfermedades infecciosas, como malaria, fiebre tifoidea, brucelosis y virus de inmunodeficiencia humana (VIH).
- Enfermedades malignas, como leucemia, linfoma y carcinoma diseminado.
- Enfermedades reumatológicas, como lupus eritematoso sistémico, vasculitis y enfermedad de Still.
- Causas diversas, como reacciones a medicamentos, trastornos facticios y reacciones a cuerpos extraños.
El enfoque diagnóstico de la FUO generalmente implica historia clínica, examen físico, pruebas de laboratorio y estudios de imágenes. Los análisis de sangre pueden incluir hemograma completo, análisis de orina, pruebas de función hepática, pruebas de función renal y serologías para enfermedades infecciosas comunes. Los estudios de imágenes pueden incluir radiografía de tórax, ecografía abdominal y tomografía computarizada (TC). En algunos casos, es posible que se necesiten pruebas adicionales, como punción lumbar, aspiración de médula ósea y biopsia, para establecer el diagnóstico.
El tratamiento de la FUO depende de la causa subyacente. Para causas infecciosas se prescribirá terapia antimicrobiana específica. En casos de malignidad, se iniciará quimioterapia o radioterapia adecuada. Para enfermedades reumatológicas, se utilizarán medicamentos inmunomoduladores. Según sea necesario, se proporciona atención de apoyo, como líquidos intravenosos, antipiréticos y analgésicos.