MRSA, o Staphylococcus aureus resistente a la meticilina, es causado por una bacteria llamada Staphylococcus aureus. Este tipo de bacteria se encuentra comúnmente en la piel o en la nariz de personas sanas y generalmente no causa ningún daño. Sin embargo, en ciertos casos, S. aureus puede volverse resistente a antibióticos como la meticilina, lo que dificulta el tratamiento de las infecciones.