Curación natural para un hígado graso

El hígado graso es una condición que ocurre cuando la grasa se ​​acumula en el hígado. Para algunas personas , el consumo excesivo de alcohol puede conducir a un hígado graso , pero también ocurre a veces en los no bebedores . Muy a menudo , las personas no saben que tienen un hígado graso , ya que tiene pocos o ningún síntoma , pero puede causar cicatrización del hígado . Si bien no existen tratamientos médicos para la condición, hay maneras naturales para que sanes a sí mismo ya su hígado. Cambios en el Estilo

cambios de estilo de vida simples pueden ayudar no sólo a curar el hígado graso , sino también mejorar su calidad de vida en general . Bajar de peso es una forma importante de reducir la cantidad de células grasas que se encuentran en su cuerpo. Una forma de perder peso es asegurarse de que hacer ejercicio con regularidad . Según la Clínica Mayo, 30 minutos de ejercicio al día puede ayudar a perder peso, incluso el ejercicio ligero como la natación , caminar o andar en bicicleta. Si usted es diabético , el control de su azúcar en la sangre también puede ayudar a curar la enfermedad de hígado graso.

Dieta

Cambios en la dieta son otra forma importante de luchar contra la enfermedad de hígado graso. Es importante no tomar en cualquier cosa que pueda poner la tensión en el hígado , como el alcohol y las drogas. En cuanto a la comida , asegúrese de comer muchas frutas y verduras y evitar los alimentos cargados de grasas saturadas. Otras cosas importantes que debe incluir son alimentos llenos de grasas saludables como el pescado y las nueces y los granos enteros como arroz integral y panes de trigo entero. Mantener su colesterol bajo control también es importante para la salud general del hígado.
Vitaminas

Según la Clínica Mayo, los resultados de los ensayos clínicos que exploran el efecto de las vitaminas en un hígado graso volvió decepcionante. Mientras que los antioxidantes de las vitaminas , teóricamente, deberían ayudar a la función hepática y reducir la inflamación, estos ensayos clínicos no apoyan esa teoría. En lugar de obtener antioxidantes de suplementos vitamínicos, una manera más segura para obtenerlas es por el consumo de frutas y verduras, como las verduras de hojas verdes y bayas.