El corazón es un músculo que se contrae regularmente todos los días de la vida. Es responsable de bombear sangre oxigenada por todo el cuerpo y eliminar la sangre desoxigenada. El músculo cardíaco está formado por células musculares cardíacas especializadas que son capaces de contraerse y relajarse de forma coordinada. Esta contracción y relajación está controlada por señales eléctricas generadas por el sistema eléctrico del corazón. La frecuencia cardíaca está controlada por el sistema nervioso autónomo, que puede aumentar o disminuir la frecuencia cardíaca en respuesta a las necesidades del cuerpo.