Esta afirmación no es necesariamente exacta. La fuerza muscular puede variar entre individuos y está influenciada por múltiples factores como la genética, el entrenamiento y el estilo de vida. Si bien ciertos grupos de músculos pueden ser generalmente más fuertes o más débiles en determinadas poblaciones, es importante considerar las variaciones individuales. Desarrollar fuerza en cualquier grupo de músculos, incluido el tríceps, requiere un entrenamiento constante y una sobrecarga progresiva.