¿Puedes morir de escarlatina?
La escarlatina generalmente no pone en peligro la vida. Sin embargo, antes era una enfermedad peligrosa y, aún hoy, alrededor de 1 de cada 1.000 personas infectadas con escarlatina padecen una forma más grave de la infección.
La escarlatina puede provocar complicaciones graves, como neumonía y meningitis, que, en casos raros, pueden provocar la muerte. Estas complicaciones también pueden causar discapacidades graves como dificultades de aprendizaje y sordera.