Una deficiencia de hierro se considera grave o peligrosa cuando los niveles de hemoglobina caen por debajo de 7 gramos por decilitro (g/dL) en hombres y 5 g/dL en mujeres. En estos niveles, una persona puede experimentar anemia grave y sus síntomas asociados, como fatiga extrema, dificultad para respirar, mareos y pica (antojos de artículos no alimentarios). En casos graves, la anemia por deficiencia de hierro puede provocar problemas cardíacos, daños a los órganos e incluso la muerte si no se trata.
Es importante consultar con un profesional de la salud si sospecha que puede tener una deficiencia de hierro. La detección y el tratamiento tempranos pueden ayudar a prevenir complicaciones y garantizar una salud óptima.