¿Qué pasa si bebes óxido?

Beber agua contaminada con tuberías oxidadas no se ha asociado científicamente con ninguna enfermedad y generalmente constituye una preocupación estética más que un peligro grave para la salud.

Aunque la ingestión de una cantidad significativa de óxido puede causar malestar estomacal, no existe evidencia científica que relacione el consumo de óxido con los efectos a largo plazo en la salud humana. Los toxicólogos consideran que el óxido es una sustancia "inerte".

Sin embargo, es esencial abordar los problemas subyacentes que provocan tuberías o contenedores oxidados, ya que pueden indicar problemas de plomería o contaminación que afectan la calidad del agua y la salud general del hogar.