¿Por qué aumenta la presión intracraneal en la acidosis respiratoria?

Acidosis respiratoria Es una afección caracterizada por un nivel anormalmente alto de dióxido de carbono (CO2) en la sangre, generalmente acompañado de una disminución del pH sanguíneo. La presión intracraneal (PIC) elevada puede ocurrir en la acidosis respiratoria debido a varios mecanismos:

1. Vasodilatación cerebral :Los niveles elevados de CO2 provocan vasodilatación de los vasos sanguíneos cerebrales, lo que provoca un aumento del flujo sanguíneo cerebral (FSC).

Este aumento del FSC puede provocar un aumento del volumen intracraneal y un aumento de la PIC.

2. Autorregulación deteriorada :Normalmente, los vasos sanguíneos del cerebro pueden ajustar su diámetro para mantener un flujo sanguíneo constante a pesar de los cambios en la presión arterial. En la acidosis respiratoria, la capacidad de estos vasos para autorregularse se ve afectada, lo que lleva a un aumento más significativo del FSC y la PIC en respuesta a niveles elevados de CO2.

3. Aumento de la tasa metabólica cerebral :La acidosis respiratoria puede estimular la tasa metabólica del cerebro, lo que lleva a un mayor consumo de oxígeno y producción de CO2. Este aumento de la actividad metabólica puede contribuir aún más a la vasodilatación cerebral y al aumento de la PIC.

4. Hipoxia :La acidosis respiratoria puede provocar hipoxia o una disminución del suministro de oxígeno al cerebro. La hipoxia provoca vasodilatación cerebral y aumento de la PIC cuando el cerebro intenta compensar la reducción del suministro de oxígeno.

5. Aumento de la producción de LCR :La acidosis respiratoria estimula el plexo coroideo, que produce líquido cefalorraquídeo (LCR), lo que provoca un aumento de la producción de LCR y un aumento de la PIC.

Es importante señalar que el aumento de la PIC en la acidosis respiratoria suele ser moderado y transitorio, y se resuelve con la corrección de la acidosis respiratoria subyacente. Sin embargo, en casos graves, la elevación prolongada o extrema de la PIC puede provocar complicaciones neurológicas graves, como hernia cerebral y muerte.