¿Cuál es la función de las glándulas salvatarias?
Funciones de las glándulas salivales:
1. Digestión: La saliva contiene enzimas como la amilasa que descomponen los carbohidratos, iniciando el proceso de digestión. La amilasa ayuda específicamente a descomponer los almidones en azúcares más simples.
2. Lubricación: La saliva actúa como lubricante, humedece la boca y ayuda en el movimiento de los alimentos durante la masticación y la deglución. Reduce la fricción entre la lengua, los dientes y otras estructuras bucales.
3. Percepción del gusto: La saliva ayuda a disolver las partículas de comida y a transportar las moléculas gustativas a las papilas gustativas de la lengua, lo que nos permite percibir diferentes sabores.
4. Protección y almacenamiento en búfer: La saliva contiene sustancias que ayudan a proteger los dientes y los tejidos bucales de ácidos, bacterias y otras sustancias nocivas. Tiene un pH ligeramente alcalino, lo que ayuda a amortiguar y neutralizar los ácidos en la boca, reduciendo el riesgo de caries.
5. Propiedades antibacterianas: La saliva contiene sustancias antibacterianas, incluidas lisozima e inmunoglobulinas, que ayudan a controlar el crecimiento bacteriano y protegen contra las infecciones bucales.
6. Mineralización de los dientes: La saliva juega un papel en la mineralización de los dientes, aportando minerales esenciales como el calcio y el fosfato para el desarrollo y fortalecimiento del esmalte dental.
7. Habla y deglución: La saliva ayuda a hablar con claridad al lubricar la lengua y ayudar con la formación de ciertos sonidos. También facilita el paso suave de alimentos y líquidos durante la deglución.
8. Curación de heridas: La saliva tiene factores de crecimiento y otros componentes que pueden ayudar a promover la cicatrización de heridas en la boca.
La disfunción de las glándulas salivales puede provocar diversos problemas de salud bucal, como sequedad de boca (xerostomía), que puede provocar molestias, dificultad para hablar o tragar y un mayor riesgo de infecciones bucales. La saliva es esencial para mantener la salud bucal y juega un papel vital en el proceso digestivo general.