Los problemas de espalda a veces pueden provocar incontinencia urinaria, pero no es un síntoma común. La incontinencia urinaria se asocia más comúnmente con afecciones que afectan el tracto urinario o los nervios que controlan la vejiga. Sin embargo, algunas afecciones de la espalda pueden ejercer presión sobre los nervios que controlan la vejiga y provocar incontinencia. Por ejemplo, una hernia de disco en la parte baja de la espalda puede presionar la cola de caballo, un conjunto de nervios que va desde la médula espinal hasta la vejiga. Esto puede causar una pérdida del control de la vejiga, así como otros síntomas como dolor de espalda, debilidad en las piernas y entumecimiento en el área del sillín (el área entre las nalgas). Si experimenta incontinencia urinaria y dolor de espalda, es importante consultar a un médico para descartar cualquier afección médica subyacente.