Coronavirus en contexto:consejos sobre cómo dormir durante la pandemia

La Pandemia de COVID-19 ha cambiado drásticamente nuestras vidas en todos los sentidos. Ha impactado no solo nuestra salud física, sino también nuestro bienestar mental y nuestros hábitos de sueño. A muchos de nosotros nos resulta difícil descansar lo que necesitamos debido al estrés y la ansiedad. A continuación se ofrecen algunos consejos que le ayudarán a dormir mejor durante este momento de incertidumbre:

Establezca un horario regular de sueño: Intenta acostarte y despertarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Esto ayudará a regular el ciclo natural de sueño-vigilia de su cuerpo.

Cree una rutina relajante a la hora de dormir. Esto puede incluir tomar un baño tibio, escuchar música relajante o leer un libro. Evite mirar televisión o utilizar dispositivos electrónicos durante al menos 30 minutos antes de acostarse. Estos dispositivos emiten luz azul, que puede alterar el sueño.

Optimice el ambiente de su dormitorio. Asegúrese de que su dormitorio sea fresco, oscuro y silencioso. Utilice cortinas opacas o persianas si es necesario para bloquear la luz y utilice tapones para los oídos si el ruido es un problema.

Evite la cafeína y el alcohol antes de acostarse. La cafeína y el alcohol pueden interferir con el sueño, así que trate de evitarlos durante al menos 4 a 6 horas antes de acostarse.

Haga ejercicio con regularidad. La actividad física regular puede mejorar su salud y bienestar general, lo que puede conducir a un mejor sueño. Intente realizar al menos 30 minutos de ejercicio de intensidad moderada la mayoría de los días de la semana.

Controlar el estrés y la ansiedad. El estrés y la ansiedad pueden dificultar conciliar el sueño y permanecer dormido. Practica técnicas de relajación como la respiración profunda, el yoga y la meditación. Hablar con un terapeuta también puede ayudar a controlar estas emociones.

Si todavía tienes problemas para dormir después de probar estos consejos, consulta a un profesional de la salud. Puede haber una condición médica subyacente que requiera tratamiento.