¿Qué hace un virus activo para destruir una célula?
Un virus activo no destruye una célula. En cambio, secuestra la maquinaria de la célula para replicarse y producir más partículas virales, comprometiendo y manipulando efectivamente las funciones normales de la célula para su propio beneficio. Una vez que el virus termina de replicarse, generalmente sale de la célula, lo que posiblemente hace que la célula explote y libere los virus recién formados al medio ambiente. Dependiendo del tipo de virus y de la célula huésped, la célula infectada puede sufrir diversos efectos, que incluyen, entre otros, muerte celular, alteración del metabolismo o disfunción.