¿Qué pasa cuando te cortas un hematoma?
Cortar un hematoma puede causar sangrado, más daño a la piel y retrasar el proceso de curación. También puede provocar infecciones y cicatrices. Cuando cortas un hematoma, corres el riesgo de dañar el tejido ya lesionado y ralentizar el proceso de curación. Por estas razones, generalmente se recomienda evitar cortar un hematoma.