¿Cómo debe tratar un socorrista a una víctima con lesión de pelvis?
1. Evalúe la escena y la seguridad:
- Asegúrese de que la escena sea segura tanto para usted como para la víctima. Si no es así, busque ayuda profesional de inmediato.
2. Llame para pedir ayuda:
- Si la lesión parece grave o si la víctima siente un dolor importante, llame a asistencia médica (ambulancia o servicios de emergencia).
3. Verifique la capacidad de respuesta y la circulación:
- Comprobar si la víctima está consciente, respira y tiene pulso. De lo contrario, comience la RCP si está capacitado para hacerlo.
4. Controlar el sangrado:
- Si hay algún sangrado visible, aplique presión directamente sobre la fuente para controlarlo.
5. Estabiliza la pelvis:
- El objetivo principal es estabilizar la pelvis y prevenir lesiones mayores. Esto se puede lograr mediante:
- Colocar suavemente una manta o ropa doblada debajo de la pelvis de la víctima, apoyando la zona lumbar.
- Si está disponible, utilice un dispositivo de inmovilización pélvica especializado (como una faja pélvica) para estabilizar aún más la pelvis.
6. No mueva a la víctima:
- Evite movimientos innecesarios de la víctima, especialmente si la lesión es grave. Cualquier intento de mover a la víctima debe hacerse con extrema precaución para minimizar el riesgo de daños mayores.
7. Proporcionar comodidad:
- Tranquilizar a la víctima y tratar de mantenerla tranquila y quieta.
- Afloje la ropa ajustada alrededor de la cintura y las caderas para reducir la presión sobre el área lesionada.
8. Monitorear los signos vitales:
- Si está capacitado en primeros auxilios, continúe monitoreando la respiración y el pulso de la víctima, así como cualquier cambio en su condición.
9. Espere ayuda profesional:
- Permanecer con la víctima y brindarle apoyo continuo hasta que llegue asistencia médica profesional.
- Proporcionar cualquier información que tenga al personal médico sobre las circunstancias de la lesión.
Recuerde, esta es una pauta general y las acciones específicas que tome pueden variar según la situación y la gravedad de la lesión. Busque siempre ayuda médica profesional ante cualquier sospecha de lesión pélvica para garantizar la mejor atención posible para la víctima.