Es importante seguir las instrucciones proporcionadas por su médico o cirujano bucal antes de extraerse las muelas del juicio. Generalmente, se recomienda dejar de comer o beber cualquier cosa, incluida agua, durante al menos 8 a 12 horas antes de la cirugía. Esto es para garantizar que su estómago esté vacío y reducir el riesgo de complicaciones durante y después del procedimiento.