Niños delgados:por qué no importa la báscula

Como padre, es natural preocuparse por la salud y el bienestar de su hijo. Sin embargo, es importante recordar que cada niño es diferente y crece a su propio ritmo. Si bien la báscula puede proporcionar cierta información sobre el peso de un niño, no siempre es el mejor indicador de su salud general.

Aquí hay algunas razones por las que la báscula no importa cuando se trata de niños delgados:

* El peso es sólo un factor de la salud general. Hay muchos otros factores que contribuyen a la salud de un niño, como su dieta, nivel de actividad y genética. Un niño delgado puede estar perfectamente sano, incluso si pesa menos que sus compañeros.

* La báscula no tiene en cuenta la masa muscular. El músculo pesa más que la grasa, por lo que un niño muy musculoso puede pesar más que un niño no tan musculoso, incluso si tienen el mismo porcentaje de grasa corporal.

* La escala puede ser inexacta. Las básculas pueden ser inexactas, especialmente si no están calibradas correctamente. Esto puede hacer que el niño se sienta desanimado o preocupado por su peso, incluso si en realidad tiene un peso saludable.

Entonces, ¿cómo puedes saber si tu hijo está sano?

Aquí hay algunas cosas que debe buscar:

* ¿Su hijo está creciendo a un ritmo constante? Los niños deben crecer a un ritmo constante, aunque este ritmo puede variar de un niño a otro. Si el crecimiento de su hijo parece haberse ralentizado o detenido, es importante que hable con su médico.

* ¿Su hijo sigue una dieta saludable? Una dieta saludable para los niños incluye muchas frutas, verduras y cereales integrales. También debe ser bajo en grasas saturadas, colesterol y sodio.

* ¿Su hijo hace suficiente ejercicio? Los niños deben hacer al menos 60 minutos de ejercicio cada día. Esto puede incluir cualquier cosa, desde jugar al aire libre hasta participar en deportes.

* ¿Está su hijo feliz y saludable? Un niño feliz y sano tendrá buen apetito, mucha energía y una actitud positiva ante la vida.

Si tiene alguna inquietud sobre la salud de su hijo, siempre es mejor hablar con su médico. Pueden ayudarlo a evaluar la salud y el desarrollo general de su hijo y asegurarse de que vaya por el camino correcto.