Su hijo de 9 años mide 48 pulgadas y pesa 50 libras. No come ni duerme, ¿debería preocuparse?
Existen varias razones por las que es posible que su hijo no coma ni duerma. Es importante hablar con él para intentar averiguar cuál es el problema. Algunas causas posibles incluyen:
- Estrés :El estrés puede afectar tanto al apetito como al sueño. Si su hijo se siente estresado por algo, como la escuela, las amistades o los problemas familiares, esta podría ser la causa de sus síntomas.
- Enfermedad :Algunas enfermedades, como los resfriados o la gripe, también pueden provocar pérdida de apetito y problemas para dormir.
- Medicación :Ciertos medicamentos pueden tener efectos secundarios que incluyen pérdida de apetito o dificultades para dormir.
- Problemas emocionales :Los problemas emocionales, como la ansiedad o la depresión, también pueden provocar cambios en el apetito y los patrones de sueño.
- Quisquilloso al comer :Algunos niños simplemente son quisquillosos con la comida y es posible que no estén interesados en comer una variedad de alimentos. Esto podría provocar desnutrición si no obtienen los nutrientes que necesitan.
- Condiciones médicas :Algunas afecciones médicas, como problemas de tiroides o diabetes, también pueden afectar el apetito y el sueño.
Si le preocupan los hábitos alimentarios y de sueño de su hijo, es importante que hable con su médico. Pueden ayudarlo a determinar la causa del problema y recomendar el mejor curso de tratamiento.