Si te desmayas por llorar demasiado, es importante consultar con un profesional médico. El llanto prolongado puede provocar deshidratación, desequilibrio electrolítico e hiperventilación. En algunos casos, puede ser un síntoma de una condición médica subyacente. Un médico puede evaluar sus síntomas, determinar si existe una causa médica y recomendar el tratamiento adecuado si es necesario.