¿Puedes broncearte si estás embarazada?

Si bien técnicamente es posible broncearse durante el embarazo, no se recomienda debido a los riesgos potenciales para el bebé en desarrollo. Durante el embarazo, su piel es más sensible y propensa al daño solar debido al aumento de los niveles de estrógeno y progesterona en su cuerpo. Esta mayor sensibilidad puede hacerla más susceptible a las quemaduras solares, lo que puede ser perjudicial para su bebé ya que puede aumentar el riesgo de defectos de nacimiento y otros problemas de salud. Además, el bronceado puede hacer que la piel se seque, le pique y le resulte incómoda, lo que puede resultar especialmente desagradable durante el embarazo cuando la piel ya está estirada y sensible.

Si estás embarazada y quieres disfrutar del sol, es importante tomar precauciones para proteger tu piel y la de tu bebé. A continuación se ofrecen algunos consejos:

- Utilice protector solar con un SPF alto. Elija un protector solar de amplio espectro con un SPF de 30 o más y vuelva a aplicarlo cada 2 horas, o con más frecuencia si está nadando o sudando.

- Usar ropa protectora. Cúbrete con camisas de manga larga, pantalones y un sombrero para ayudar a bloquear los rayos del sol.

- Buscar sombra. Evite pasar demasiado tiempo bajo la luz solar directa, especialmente durante las horas pico de 10 a. m. a 4 p. m.

- Manténgase hidratado. Beba mucha agua para ayudar a que su piel se mantenga hidratada y saludable.

- Evita las camas solares. Las camas de bronceado emiten radiación ultravioleta (UV), que puede ser perjudicial para la piel y la del bebé.

Si tiene alguna inquietud sobre el bronceado durante el embarazo, asegúrese de hablar con su médico.