¿Por qué a las mujeres no se les permite fumar durante el embarazo?
1. Desprendimiento de placenta :Fumar puede hacer que la placenta se separe de la pared uterina antes del nacimiento, lo que provoca un sangrado intenso y posibles daños al bebé.
2. Nacimiento prematuro :Fumar aumenta el riesgo de parto prematuro, que es cuando un bebé nace antes de las 37 semanas de gestación. Los bebés prematuros pueden enfrentar diversos problemas de salud, incluidos problemas pulmonares, problemas de visión y dificultades de aprendizaje.
3. Bajo peso al nacer :Los bebés nacidos de madres que fuman durante el embarazo suelen tener un peso más bajo al nacer. Los bebés con bajo peso al nacer corren un mayor riesgo de sufrir complicaciones de salud y retrasos en el desarrollo.
4. Aborto espontáneo :Fumar durante el embarazo puede elevar el riesgo de aborto espontáneo, especialmente durante el primer trimestre.
5. Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) :Los estudios han demostrado una mayor incidencia de SMSL en bebés expuestos al humo durante el embarazo o después del nacimiento.
6. Anomalías del crecimiento fetal :Fumar puede afectar el crecimiento y desarrollo adecuados del feto, lo que puede provocar posibles problemas de salud física y mental en el futuro.
7. Problemas de salud a largo plazo para el bebé :Los niños expuestos al humo en el útero pueden enfrentar un mayor riesgo de sufrir problemas respiratorios, como asma, así como infecciones de oído, problemas dentales y trastornos del comportamiento.
8. Mayor riesgo de complicaciones maternas :Fumar durante el embarazo puede aumentar el riesgo de que la madre sufra complicaciones relacionadas con el embarazo, como diabetes gestacional, preeclampsia y placenta previa.
9. Infertilidad :Fumar puede afectar la fertilidad y aumentar las posibilidades de experimentar dificultades durante la concepción.
Teniendo en cuenta los efectos perjudiciales del tabaquismo en el embarazo, se recomienda encarecidamente que las mujeres se abstengan de fumar antes y durante el embarazo. Evitar la exposición al humo de segunda mano también es fundamental para el bienestar tanto de la madre como del bebé.