¿Cómo se hacen las pruebas de ETS en el hombre?
1. Prueba de orina:
- Se recolecta una muestra de orina y se analiza para detectar la presencia de ciertas bacterias o virus que causan enfermedades de transmisión sexual.
- Se utiliza comúnmente para detectar clamidia, gonorrea y, a veces, tricomoniasis.
2. Análisis de sangre:
- Se toma una muestra de sangre para comprobar la presencia de anticuerpos que el cuerpo produce en respuesta a determinadas infecciones de ETS.
- Los análisis de sangre pueden detectar sífilis, VIH y, a veces, hepatitis B.
3. Prueba de hisopo o cultivo:
- Se utiliza un hisopo de algodón para recoger una muestra de la zona afectada (uretra, recto o garganta).
- Luego, la muestra se envía a un laboratorio para su cultivo a fin de identificar bacterias o virus específicos que causan la infección.
- Este método se utiliza para detectar gonorrea, clamidia, virus del herpes simple (VHS) y sífilis.
4. Pruebas rápidas en el lugar de atención:
- Son pruebas de diagnóstico que brindan resultados rápidos y se pueden realizar en el consultorio de un médico o en una clínica.
- Utilizan una pequeña muestra de sangre o un hisopo para detectar la presencia de organismos específicos que causan ETS.
5. Examen genital:
- Durante un examen físico, el médico puede inspeccionar visualmente los genitales en busca de signos de ETS, como úlceras, llagas o erupciones cutáneas.
6. Pruebas de amplificación de ácidos nucleicos (NAAT):
- Estas pruebas moleculares detectan el material genético (ADN o ARN) de microorganismos causantes de ETS.
- Las NAAT son muy sensibles y pueden identificar ETS incluso cuando están presentes en bajas cantidades.
Las pruebas específicas recomendadas para un individuo dependerán de sus síntomas, antecedentes sexuales y factores de riesgo. Es esencial consultar a un proveedor de atención médica para realizar evaluaciones y pruebas adecuadas para garantizar un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado de cualquier ETS.