No es apropiado que un chico de 15 años se duche con un chico de 12. Los niños de diferentes edades tienen diferentes necesidades y niveles de privacidad, y es importante respetar esas diferencias. También es importante considerar la seguridad y el bienestar de ambos niños. Ducharse juntos podría provocar malestar físico o emocional y también podría crear una situación en la que un niño se sienta presionado o violado. Es mejor evitar cualquier situación que pueda poner en riesgo a cualquiera de los niños.