¿Qué se considera abuso en un asilo de ancianos?

1. Abuso físico:

Esto incluye cualquier contacto no accidental que cause lesiones o dolor. Puede adoptar diversas formas, como por ejemplo:

- Golpes, bofetadas, patadas o pellizcos.

- Empujar o empujar.

- Agarrar, tirar o torcer brazos o piernas.

- Uso inadecuado de restricciones físicas o fuerza excesiva durante el cuidado.

- Forzar la entrada de medicamentos a un residente sin su consentimiento.

2. Abuso emocional:

El abuso emocional implica actos o comportamientos que causan angustia emocional o angustia mental en el residente. Los ejemplos incluyen:

- Abuso verbal, insultos, insultos, burlas o amenazas.

- Humillación o vergüenza del residente frente a otros.

- Aislar socialmente al residente o negarle el acceso a visitas.

- Ignorar las necesidades, solicitudes o inquietudes del residente.

3. Descuido:

La negligencia se refiere a la falta de satisfacción de las necesidades o derechos básicos de un residente de un asilo de ancianos. Puede adoptar diferentes formas, como por ejemplo:

- Nutrición o hidratación inadecuada que provoque desnutrición o deshidratación.

- Falta de higiene adecuada, lo que provoca infecciones o enfermedades de la piel.

- No proporcionar atención médica esencial, incluida la gestión de medicamentos.

- Descuidar las precauciones de seguridad, provocando caídas u otros accidentes.

4. Abuso sexual:

Esto implica cualquier contacto o comportamiento sexual no deseado hacia el residente. Los ejemplos incluyen:

- Toques, caricias o besos no deseados.

- Relaciones sexuales u otro contacto sexual sin el consentimiento del residente.

- Exponer al residente a contenidos sexuales o pornografía.

5. Abuso financiero:

El abuso financiero se refiere al uso no autorizado o ilegal de los recursos o activos de un residente. Puede incluir:

- Robar dinero, joyas o posesiones.

- Obligar al residente a firmar documentos financieros que no comprende.

- Mal manejo de las finanzas o bienes del residente.

6. Abuso farmacéutico:

El abuso farmacéutico implica el uso inadecuado de medicamentos para controlar el comportamiento de un residente. Los ejemplos incluyen:

- Sobremedicar al residente para sedarlo o facilitar su manejo.

- Administrar medicamentos sin prescripción válida ni orden médica.

- Ignorar o no controlar los efectos secundarios de los medicamentos.

7. Abuso Psicológico:

El abuso psicológico incluye manipulación, amenazas u otros comportamientos destinados a controlar o asustar a un residente. Los ejemplos incluyen:

- Intimidación o amenazas de daño.

- Aislamiento o segregación de otros residentes.

- Coaccionar al residente a firmar documentos legales o tomar decisiones en contra de su voluntad.

Es fundamental que los hogares de ancianos cuenten con políticas, procedimientos y capacitación del personal adecuados para prevenir y detectar cualquier forma de abuso. Los familiares, amigos o cuidadores también deben estar atentos y denunciar cualquier comportamiento sospechoso o maltrato a las autoridades correspondientes o a las oficinas del defensor del pueblo responsables de supervisar la atención en residencias de ancianos.