¿Por qué se debe institucionalizar a los enfermos mentales?

La afirmación de que "los enfermos mentales deberían ser institucionalizados" es problemática y está arraigada en puntos de vista obsoletos sobre las enfermedades mentales. Si bien algunas personas con enfermedades mentales graves pueden beneficiarse de la atención especializada en un entorno estructurado, la institucionalización no debería ser la única opción ni la predeterminada. Muchas formas de enfermedades mentales pueden controlarse eficazmente mediante intervenciones comunitarias, como terapia ambulatoria, gestión de medicamentos y grupos de apoyo. La institucionalización solo debe considerarse cuando sea absolutamente necesaria y como último recurso, centrándose en brindar atención individualizada y orientada a la recuperación que promueva la independencia, la dignidad y la integración en la comunidad.