A veces, todavía estás hablando con tus amigos y, sin ningún motivo, sufres un ataque de pánico:la cara, las manos temblando y simplemente en blanco. ¿Por qué sucede eso?
- Ansiedad social:El trastorno de ansiedad social (TAE) se caracteriza por un miedo excesivo a las situaciones sociales, incluido hablar con amigos. Es posible que le preocupe ser juzgado, avergonzado o rechazado, y esta ansiedad puede provocar un ataque de pánico.
- Ansiedad anticipatoria:es posible que estés anticipando un ataque de pánico incluso antes de empezar a hablar con tus amigos. Esta expectativa de sentirse ansioso o sufrir un ataque de pánico puede desencadenar una profecía autocumplida y conducir a un ataque de pánico real.
- Bucles de pensamiento:durante un ataque de pánico, es posible que experimentes pensamientos intrusivos que se repiten en tu mente. Estos pensamientos pueden estar relacionados con el miedo a perder el control, el miedo a volverse loco o el miedo a la muerte. Estos bucles de pensamiento pueden intensificar el ataque de pánico y hacerlo sentir aún más abrumador.
- Hipervigilancia:La hipervigilancia es un estado de mayor conciencia y atención a amenazas potenciales. Puede ser un síntoma de trastornos de ansiedad y puede hacerte más susceptible a ataques de pánico en situaciones en las que te sientes vulnerable.
- Desencadenantes emocionales:Ciertos temas o discusiones pueden desencadenar fuertes respuestas emocionales, como ira, tristeza o ansiedad. Si estás hablando de un tema difícil con tus amigos, estas emociones podrían intensificarse y provocar un ataque de pánico.
- Desencadenantes físicos:en ocasiones, las sensaciones físicas, como un cambio en el ritmo cardíaco o la respiración, pueden desencadenar un ataque de pánico. Estas sensaciones pueden ser causadas por estrés, ansiedad u otros factores que no están directamente relacionados con la conversación que estás teniendo.
Si sufre ataques de pánico, es importante buscar ayuda profesional. Un terapeuta puede ayudarlo a comprender las causas fundamentales de sus ataques de pánico y desarrollar mecanismos de afrontamiento para controlarlos.