Generalmente, los cónyuges no son responsables de las deudas del otro en la mayoría de las jurisdicciones. Esto significa que si un marido abandona a su esposa, ella no es responsable de pagar sus cuentas a menos que haya acordado específicamente hacerlo. Sin embargo, existen algunas excepciones a esta regla. Por ejemplo, en algunos estados, la esposa puede ser responsable de las facturas de su marido si éstas se produjeron durante el matrimonio y en beneficio de la familia. Además, una esposa puede ser responsable de las facturas médicas de su marido si es legalmente responsable de su cuidado.
Si tiene alguna pregunta sobre su situación específica, es importante hablar con un abogado.