Sí, las cajas de cartón tiradas por el suelo pueden considerarse un peligro en el lugar de trabajo. Pueden crear un peligro de tropiezo, lo que puede provocar lesiones como caídas, esguinces y fracturas. Además, las cajas de cartón pueden bloquear pasillos y puertas, lo que dificulta que los empleados se muevan de forma segura. Las cajas de cartón también pueden acumular polvo y escombros, lo que puede contribuir a alergias y otros problemas respiratorios. Por último, las cajas de cartón pueden servir de escondite para plagas, como roedores e insectos, que pueden suponer un peligro para la salud.